Ya estamos en el séptimo mes, y Alan y yo seguimos bien, cada vez más incómodos pero bien: él sigue creciendo, y yo engordando.
Me parece mentira que quede tan poco. Hace nada me parecía que esto no me estaba pasando a mí. Siguiendo mi lógica aplastante, también me parece mentira que aún quede tanto. Ya estoy cansada de estar embarazada la verdad. Una no se acaba de acostumbrar a todas las molestias y limitaciones que acompañan. Sí, cuando el pingüino nazca se compensará todo, y mi cuerpo se encargará de que me olvide de todo lo mal que lo pueda estar pasando, vale. Compensará y con creces. Vale.
Pero mientras, aparte de fastidiarme con las molestias, hay muchas cosas que echo de menos.
He aquí una lista:
* Un buen carpaccio de ternera/atún
* Hartarme de sashimi
* Beber tónica
* Dormir boca abajo
* Ir de tapas de embutidos
* Un vermut bien frío en el paseo marítimo
* Una fideuà con allioli auténtico
* Que me hagan un masaje en la espalda que me deje para el arrastre
* Regar un saganaki con un blaco de rueda
* Ir a un parque de atracciones
* No tener que mirar qué endulzantes lleva cada bebida
* Champiñones crudos
* Un bocata de foie gras con queso
Estas son unas pocas cosas, para que quede constancia. No quiero que la memoria me juegue una mala pasada. Durante el año que viene me iré resarciendo de muchas de ellas. Hasta entonces, mejor no pensarlo mucho, ya tengo demasiado que ir pensando, decidiendo y preparando.
Así no podemos seguir 
Pues ya sabes, vete haciendo acopio de todas esas cosas y en cuanto nazca Alan…te pones morada!!
La verdad que, sí, merece la pena pero sí es un coñazo.
Intenta «disfrutarlo» en la medida de lo posible si es que te es posible y…mucho ánimo que ya queda menos!!!
Eso, disfruta, disfruta… y piensa, decide y prepara, que ya va quedando menos!
Ánimo que ya llegará el desquite… y además, si le das el pecho podrás comer todo lo que te dé la gana y no sólo no engordarás más sino que volverás a tu peso normal en menos tiempo 😉
Sólo espero que me queden fuerzas para disfrutar de lo que vendrá después. Menos mal que la mayoría de mis caprichos son de comer que no requiere mucho esfuerzo 🙂
Por lo que veo eres muy optimista. Bueno, en mi opinión, y siempre en mi modesta opinión (lo repito para que nadie se sienta ofendido), hay unas cosas que el nacimiento del bebé compensa y otras incomodidades que con el tiempo también se compensarán. Quiero decir habrás leído mucha literatura sobre el embarazo pero el post-parto también forma parte del proceso de tener un bebé. No te asustes pero, las primeras semanas no son tan bonitas como quizás puedas creer. Así que ánimo, disfruta las incomodidades del embarazo estos 2 últimos meses que luego descubrirás nuevas. Un abrazo a los 3, claro, como siempre.
¿Optimista? ¿yo? Me confunde usted con otra 😀
En ningún momento pienso que todo va a ser de color de rosa, al contrario. Cuento que los primeros meses serán un infierno, y que con suerte tendremos algunos buenos momentos que nos ayudarán a superarlo.
Con lo que cuento es que acabará compensando, más que nada por lo que vais diciendo todos; obviamente, no justo después del parto, que no estaré yo para fiestas, sino con el tiempo.
Ahora, los huevos fritos que me voy a zampar en cuanto llegue a casa no los perdono 🙂
Me alegro mucho de que todo vaya bien y de que ya quede poquito para ver al bichito, bueno nosotros en foto hasta que vengáis pero nos conformaremos.
Pues desde mi reciente experiencia te puedo decir que el embarazo es mejor que el parto y el parto mucho mejor que el postparto, repito en mi caso. He pasado unas primeras semanas horribles, la semana pasada se acabó la cuarentena y sigo con molestias. Mañana iremos al médico, dirá que está todo estupendo porque a él no le molesta… En fin eso sí, la peque es un sol, bueno da guerra pero igualmente te la comerias a besitos.
Si quieres te envío en un mail algunas cosillas que a mi me hubiera gustado saber antes y mira que he leído mil cosas y he hablado con mucha gente. Por si te puede ser de utilidad. Ya me lo dirás.
Besos a los tres.
¿¿¿Alan??? ¡¡Jarr!!