Internet nos hace la vida más fácil, JA!

Hace años, tú te querías ir de viaje a Villarriba, ibas a la agencia de viajes del barrio, o te comprabas la guía aquella tocha de los hoteles de españñña y mirabas qué hoteles había en el mencionado pueblo. Entonces escogías uno basado en varios criterios, como el precio, las estrellas e incluso el nombre del hotel («hotel acapulco playa» solía ser el tipo de nombre a evitar) y hacías la reserva. Luego si llegabas al hotel y era un cuchitril pues renegabas un rato, le echabas las culpas a la agencia por no avisarte de dónde te metías (aunque seguramente ellos tampoco lo sabían) y bueno, tratabas de ir al hotel lo mínimo imprescindible, qué remedio.

Cuando empezó la revolución de las .com entonces a todas las agencias de viaje les dio por poner su página web, a lo que los consumidores nos congratulamos con nuestra recién ganada libertad; ya no dependíamos de la agencia del barrio que, sin ninguna duda, intentaba colarnos los sitios que más comisión les daban. Ahora podíamos ELEGIR!!! Claro, pasada la novedad, poco tardaron todas las agencias en tener más o menos los mismos sitios y precios. Por suerte, a lo poco se subieron al carro los propios hoteles, ahora ya no sólo dependíamos de una docena de webs de agencias de viaje, podíamos ir directamente a las webs de los cientos de hoteles de Villarriba, yuhuuuu (sin que ello supusiera ningún tipo de rebaja sustancial en el precio, claro)!

Pero lo de las .com pasó de moda y ahora lo que se lleva es que los usuarios aporten contenidos y, hasta den su opinión (aunque sea mayormente incorrecta). Así que ahora sí, por fin, tenemos la libertad que nos merecemos: ir a un sitio como tripadvisor y leer las opiniones de viajeros que han estado de verdad en Villarriba y me pueden recomendar un hotel bueno, bonito y barato, y de paso algún restaurante de la localidad. Eso sí, la gente podría ponerse de acuerdo al opinar, leñe, que siempre encuentras opiniones contrarias de un mismo sitio y ya no sabes a quién creer.

Total, que al final, lo que hace unos años tardabas media hora en hacer (o una si había algo de cola en la agencia) ahora tardas 3 ó 4 días y hasta las narices de leer quejicas que esperan el oro y el moro («no está mal para ser un hotel de dos estrellas, pero es mejor el Ritz«, no te jode!), a los que sufren el típico síndrome de que en vacaciones se ve todo de color de rosa y ya no se acuerdan de las pegas («había que pegarse con el resto de clientes en la cola del desayuno para pillar un croissant, pero deportivamente, no daban golpes por debajo del cinturón, le doy 5 minipuntos«, total, el desayuno no es la comida más importante del día ni nada) o a los que directamente no saben ni usar la página («un hotel fantástico, un punto!!» para estos idiotas: 1=MAAALO, 5=BUEEENO).

Lo peor es que puedes acabar igual en un cuchitril y encima tú serás el único culpable por hacer caso a lo que unos desconocidos escriben en Internet. Qué te dijo tu madre sobre los desconocidos?